Cuando
pierdes contacto con la quietud interior, pierdes contacto contigo
mismo Cuando pierdes contacto contigo mismo, te pierdes en el
mundo.
Tu
sentido más interno de ti mismo, tu sentido de quién eres, es
inseparable de la quietud. Ése es el Yo Soy que es más profundo
que el nombre y la forma.
La
quietud es tu naturaleza esencial. ¿Qué es la quietud? El espacio
interno o conciencia en el que las palabras de esta página son
percibidas y se convierten en pensamientos. Sin esa conciencia, no
habría percepción, ni pensamientos, ni mundo.
Tú
eres esa conciencia, disfrazada de persona.
El
equivalente del ruido externo es el ruido interno del pensamiento.
El equivalente del silencio externo es la quietud interna.
Cuando
quiera que haya silencio a tu alrededor, escúchalo. Esto significa
que, simplemente, has de darte cuenta de él. Préstale atención
Escuchar el silencio despierta la dimensión de quietud dentro de
ti, porque sólo la quietud te permite ser consciente del
silencio.
Observa
que en el momento de darte cuenta del silencio que te rodea, no
estás pensando. Eres consciente, pero no
piensas.
Cuando te das cuenta del silencio, se
produce inmediatamente ese estado
de serena alerta interna.
Estás presente. Has salido de miles de años de
condicionamiento
colectivo humano.
Mira
un árbol, una flor, una planta. Deja que tu conciencia descanse en
ellos. ¡Qué quietud manifiestan, qué profundamente enraizados
están en el Ser! Permite que la naturaleza te enseñe la
quietud.
Cuando
miras un árbol y percibes su quietud, tú mismo te aquietas.
Conectas con él a un nivel muy profundo. Te sientes unido a
cualquier cosa que percibes en y a través de la quietud. Sentir tu
unidad de ti mismo con todas las cosas, es verdadero amor.
El
silencio ayuda, pero no es necesario para hallar la quietud.
Aunque haya ruido, puedes sintonizar con la quietud subyacente, el
espacio en el que surge el ruido. Ese es el espacio interno de
pura conciencia, la conciencia misma.
Puedes darte cuenta de
que la conciencia es el trasfondo de todas tus
percepciones
sensoriales, de toda tu actividad mental. Siendo consciente
de
la conciencia surge la quietud interna.
Cualquier
ruido molesto puede ser tan útil como el silencio. ¿Cómo?
Abandonando tu resistencia interna al ruido y permitiendo que sea
como es; esa aceptación también te lleva al reino de paz interna
que es quietud.
Cuando
aceptas profundamente este momento tal como es ?tome la forma que
tome?, estás sereno, estás en paz.
Presta
atención a la pausa: la pausa entre dos pensamientos, al breve y
silencioso espacio entre las palabras de una conversación, entre
las notas de un piano o de una flauta, o al breve descanso entre
la inspiración y la espiración.
Cuando prestas atención a esas
pausas, la conciencia de «algo» se
convierte simplemente en
conciencia. Surge de dentro de ti la dimensión
informe de pura
conciencia y reemplaza la identificación con la forma.
La
verdadera inteligencia actúa silenciosamente. Es en la quietud
donde encontramos la creatividad y la solución a los
problemas.
¿Es
la quietud tan sólo ausencia de ruido y contenido? No; es la
inteligencia misma: la conciencia subyacente de la que nace toda
forma. ¿Y cómo podría eso estar separado de quien tú eres?
De
allí salió la forma que crees ser, y lo que la sustenta.
Es
la esencia de todas las galaxias y de las hojas de hierba; de
todas las flores, árboles, pájaros, y de todas las demás
formas.
La
quietud es la única cosa de este mundo que no tiene forma. Pero en
realidad no es una cosa, y tampoco es de este mundo.
Cuando
miras un árbol o un ser humano desde la quietud, ¿quién está
mirando? Algo más profundo que la persona. La conciencia está
mirando a su creación.
En
la Biblia se dice que Dios creó el mundo y vio que era bueno. Eso
es lo que ves cuando miras sin pensamiento, desde la quietud.
¿Necesitas
más conocimiento? ¿Crees que más información, u ordenadores más
rápidos, o más análisis científicos e intelectuales van a salvar
al mundo? ¿No es sabiduría lo que más necesita la humanidad en
estos momentos?
Pero
¿qué es la sabiduría? ¿Dónde se encuentra? La sabiduría viene
cuando uno es capaz de aquietarse. Sólo mira, sólo escucha. No
hace falta nada más. Aquietarse, mirar y escuchar activa la
inteligencia no conceptual que anida dentro de ti. Deja que la
quietud dirija tus palabras y tus acciones.
El
Silencio (la quietud) Habla
Título Original: ?Stillnes
Speaks?
2003, Eckhart Tolle